jueves, 31 de mayo de 2012

#Tuiteando

Nos “conocimos” en el dichoso Twitter. Sucumbimos a su embrujo. Todas usábamos nombres de usuario falsos  y avatares fotografías de una sonrisa, una mirada y un escote, respectivamente. De eso hacía ya casi un año. Era hora. Nos queríamos ver las caras. Hablar paja.  Reír un rato.  El cielo estaba oscuro y el entorno hasta frío para ser cualquier día en el Trópico.
Nos encontraríamos por primera vez, en un lugar poco convencional. Queríamos hacer algo que normalmente, no haríamos.  Yo –@Hijademimadre– sugerí el Mercado del Marisco, sobre el malecón como punto de encuentro pues a @Porteña le fascina el mar y no estaba segura de qué tan solventes eran las otras dos. @GingerAlex como que no estaba muy entusiasmada—siempre pensé que era como medio yeyesita—pero al final la convencimos.  Sería como a las dos de la tarde.